La Casa Ferrán es una obra plenamente modernista del arquitecto Pablo Monguió, que fue construida en 1910, en la llamada Calle Nueva.
El edificio destaca por la elegancia y el dinamismo de su decoración, inspirada en vegetales y formas curvadas donde sobresalen estructuras de forja y fundición.
En su interior, destacan los elementos hechos de mármol, y el cerramiento del portal.
Esta casa se sitúa en el contexto turolense de principios del siglo XX y es reflejo de una nueva clase social burguesa que cambió su mentalidad hacia el arte, y su arquitecto supo plasmar perfectamente.
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