DESDE FILADELFIA: LA EXPERIENCIA DE SARA GÓMEZ

La charla que vino a darnos ayer una antigua alumna del instituto, Sara Gómez, me ha hecho reflexionar profundamente sobre mi futuro. 

Al hablarnos desde nuestro mismo punto de vista con tanta seguridad, me ha hecho comprender que la vida no se acaba en una ciudad tan pequeña y carente de oportunidades como Teruel, hay que salir a buscar y luchar por lo que se quiere, por lo que uno mismo desea, encontrar VIDA más allá de estas cuatro paredes, que el mundo es un océano muy grande y nos estamos ahogando en un vasito de agua. 

Me gustó mucho la forma en la que nos habló, cómo nos contó sus experiencias y sobre todo lo feliz que se le veía. Su actitud hacia nosotros me hizo pensar que, a veces, nos “ofuscamos” con algo de manera estúpida solo por ignorancia de todo lo que podemos hacer, gracias a dios hoy en día tenemos unas posibilidades casi ilimitadas para realizar los proyectos que queramos, para conseguir nuestros objetivos y para perseguir nuestros sueños (pero una cosa está clara, sin esfuerzo ni trabajo no se llega a ningún sitio), en muchas ocasiones nos parece que esto es imposible, pues ignoramos totalmente lo que somos capaces de hacer y nuestra mente está muy cerrada, buscamos de alguna manera aquello que tenemos seguro al lado de nuestra casa, pero no hay nada por lo que temer, casi todo puede conseguirse, podemos llegar a donde queramos, incluso alcanzar la universidad e irte a Filadelfia a continuar con los estudios si te da la “venada”. Esta libertad en la que hemos sido educados tenemos que aprovecharla ahora que podemos.

Estas fueron las sensaciones que me transmitió y el hecho de saber que alguien de mi misma ciudad ha podido escapar y conseguir sus propósitos lejos de aquí, hace que yo piense en ello y sienta que también pueda conseguirlo, el trabajo se ve recompensado y te abre muchas puertas de cara al futuro dándote la oportunidad de realizarte como persona y sentirte a gusto contigo mismo lejos de este cuchitril al que (por lo menos hoy en día) pertenecemos.

Alejandro Abad