domingo, 25 de enero de 2015

POR LO QUE TE PARAS A VER, charla de Rosa Gasque sobre la belleza

Nos adentramos en un mundo de plena subjetividad donde todo vale, nuestros sentidos, la sensibilidad de cada persona, la capacidad de ver más allá que el aspecto físico de las cosas, todo ello está relacionado con el concepto de belleza. Sin embargo, ¿qué es realmente belleza?, ¿se trata de algo superficial o simplemente es algo que forma parte de nosotros?
Es difícil atribuirle una definición exacta y precisa a este concepto puesto que engloba en sí una diversidad de campos. Gracias a la charla recibida por una joven estudiante de Bellas Artes, Rosa Gasque Rubio,  hemos conseguido fluir nuestras mentes y lograr un acercamiento hacia lo que es la belleza. En puntos generales, se dice que cada cual tiene su idea y patrones de belleza, esto es cierto, pero tampoco es menos cierto que no toda idea de belleza parte de una valoración subjetiva puesto que en ocasiones existen normas a la hora de definir belleza. Todo esto está relacionado con los estereotipos que cada vez están dominando más a la sociedad y que hacen de nosotros la creación de una belleza que en el fondo es inexistente. Por otra parte la belleza también depende de la influencia sociocultural de cada entorno que ha establecido sus modelos y sus límites a la hora de establecer qué es bello, como ya sabemos, no tiene nada que ver la belleza en el mundo oriental que en el occidental. Por tanto, no hay que olvidar que este concepto guarda numerosos de enigmas y que la belleza depende de cada uno, no obstante hay cosas que evidentemente por su aspecto son bellas y por tanto esto nos puede hacer dudar y plantearnos si la belleza es propiedad de las cosas o somos nosotros quienes se la atribuimos, desde mi punto de vista, la belleza guarda relación con ambos, es decir, por una parte como ya he citado anteriormente existen cosas que sabemos que ya son bellas de por sí y eso es indubitable, pero por otra parte en ocasiones vemos cosas que sabemos que realmente son desagradables o bien ordinarias, pero bien nos resultan agradables y somos capaces de encontrarles un punto de belleza.
Por tanto la belleza engloba diversos campos, no solo nos referimos al arte, a la música, a los paisajes… sino que podemos encontrar belleza en lo más simple y ordinario, en un momento, en una idea, es decir, en todo aquello que nos cautive, que nos sorprenda, que nos agrade, aunque solo sea en cuestión de segundos.
En definitiva, una de las cosas que más me han impactado han sido las imágenes representadas por un vídeo, en el cual hemos podido ver que la belleza no está en todo lo que nos resulta agradable de ver sino que incluso en los peores momentos, en la sangre, en la muerte, encontramos también belleza.
Por tanto la belleza se trata de algo simple, de sentirnos bien con nosotros mismos. Al fin y al cabo no existe nadie que marque si una persona es bella o no, no todo es visto con los mismos ojos.
Sonia Delgado
La charla de este viernes ha sido realmente "bella" porque se notaba que a Rosa le encantaba el tema que estaba tocando y le llenaba hablar de él. Aunque en un tono bajito, nos lo ha transmitido a todos y nosotros lo hemos notado, pues ha sido junto, con la de la cárcel, una de las charlas más dinámicas y con la que nos hemos llevado muchas reflexiones y cuestiones en la cabeza. La manera de abordar un tema tan abstracto como la belleza ha sido desde un enfoque que vamos creando según "lo que" vemos hasta otro que nos viene impuesto por los genes desde que nacemos, que podemos modificar pero que es lo que nos define exteriormente. De las preguntas que nos ha lanzado hemos sacado reflexiones como que quizá no exista la belleza o quizá es tan subjetiva que haya tantos tipos de belleza como de personas y opiniones; y que la misma persona puede sufrir un cambio en su idea y decidir que algo ha cambiado de ser bello a no serlo o viceversa. ¿Quiénes imponen los cánones de belleza?, ¿sociedad o empresas publicitarias? Hemos relacionado las artes con las Bellas Artes y hemos visto cómo pinturas preciosas, detalladas y minuciosas podían estar mostrando un pasaje que no nos agradaba pero ser bonitas en sí. Hemos comprobado cómo el tema "belleza" tiene numerosas contradicciones. Hemos hecho una pequeña evolución en la historia occidental y especialmente cristiana del prototipo bello que suele ser femenino: la mujer. Hemos visto cómo la RAE "nos da largas" en este asunto y lo deja a gusto del sujeto, con bastante libertad, guiándonos por los sentidos. Sabemos que hay belleza tangible e intangible; asociando la intangible con la interior, lo que nos transmite, por ejemplo, una bella persona aun no siendo guapa. Me ha hecho reflexionar sobre el campo tan vasto al que nos enfrentamos este trimestre. La otra parte de la charla ha sido su experiencia de estudiante universitaria, cómo se da el salto del instituto a la facultad, y creo que no nos hemos lanzado a preguntarle porque o lo vemos lejano (que no lo está) o nos da un poco de susto. La charla ha sido una genial iniciación y muy cercana.
Noelia Arnau
Ofelia muerta, Millais

¿Cómo alguien es capaz de decir a ciencia cierta qué es la belleza, qué es lo bello?, ¿por qué las personas ponemos etiquetas a todo tan a la ligera?, ¿cómo es posible que en el diccionario salga la definición de belleza siendo una palabra tan abstracta, demasiado subjetiva para poder describirla?; es una palabra que escribiríamos mil páginas sobre ella y nos quedaríamos cortos.
En verdad siempre hemos formulado mal una pregunta sobre este tema; no deberíamos preguntar: ¿qué es la belleza? sino ¿qué es para ti la belleza? Y aun así sería tan difícil de explicar... pues la belleza no la puedes expresar, es una sensación de vacío o de relleno, que comienza a crecer en el estómago y deseas gritar de euforia y no parar de mirar ni de escuchar nunca, o no dejar que se escape ese momento jamás.
A lo largo de la historia la sociedad se ha encargado de dividir lo bello de lo feo, se supone que son palabras totalmente opuestas, como lo bueno y lo malo, el sí y el no. Estas palabras han tenido una fuerte influencia en nuestra cultura, en nuestra forma de vida. La humanidad se ha encargado de establecer unos estereotipos erróneos de belleza, como el canon actual de la mujer, que dice que una mujer perfecta tiene que tener una 90-60-90, o el ideal que hemos arrastrado hasta hace pocos días atrás, en el cual una mujer debería tener la piel blanca como la nieve y su cabello de un color dorado como el oro. Tampoco se salva el hombre de estos estereotipos, pues tiene que ser un hombre musculado, de cara bonita para ser esculpido, pintado, admirado.
También podemos hablar de la belleza del arte, creada por el hombre para poder expresar la belleza y sus sentimientos. Lo bello se supone que es algo que ves y necesitas parar para mirarlo bien, se supone que es un sonido que te envuelve y necesitas buscar esa melodía, se supone que es una frase o incluso un libro que te llega a lo más hondo del corazón y lo leerías mil veces y nunca te cansarías. Sin embargo, la humanidad ha puesto etiquetas también para el arte, destrozando la opinión de cada uno, incluyendo la mía, pues a veces sigo cometiendo el error de tachar algunas obras como horrendas, sin fijarme demasiado y sin llegar a pensar que pueden ser lo más bello que he observado en mi vida.
¿Qué es bello desde mi punto de vista? Reconozco que soy muy optimista y que veo la vida desde unos ojos esperanzados y llenos de motitas acumuladas de lágrimas por decepciones, pero para mí, lo bello abarcaría casi todo; para mí la belleza se encuentra en cada átomo de nuestro universo. Es tan bello lo que nos rodea... Nuestros ojos están tapados por un velo creado por las personas, que muy poca gente puede romper. Lo bello puede descubrirse en los pequeños momentos; puede verse en la bondad, en la compasión, en la generosidad y en la amabilidad que alguna gente posee; puede verse en cada cultura, ya sea de Oriente o de Occidente. 
Tiene su máximo esplendor en la naturaleza, la cual nos envuelve como si fuéramos parte de ella y podemos caminar dentro de esos paisajes de color eterno, escuchándola y oliéndola como si la vida nos fuera en ello. Nos enseña su lado más salvaje, su lado más tierno, su lado más peligroso, pero siempre con su toque de hermosura, de divinidad. La naturaleza abarca todos y cada uno de los cielos que hemos visto tanto nosotros, como nuestros ancestros; puede dejarnos apreciar sus pequeñas florecillas, con esos olores que nos hechizan, puede dejarnos caminar por sus senderos más fríos cubiertos de un blanco que escuece a los ojos y que nos da paz, pureza. Puede hacernos caminar entre selvas tan verdes que parecen cuadros, puede hacernos visualizar un mar con mil tonos de azul y tantos paisajes más... Además, la naturaleza nos invita que escuchemos a los grillos y a los búhos por la noche y a los pájaros a la madrugada.
La belleza se puede hallar en todo aquello que nos fijemos. Se puede encontrar en cada tropiezo que nos lleva al éxito; en cada caída que nos hace tener ensangrentadas las rodillas y estar en la cima. La belleza la podemos ver en cada muerte, si nos cuentan su linda historia, en cada historia de amor que acaba en tragedia; la podemos captar en cada melodía desafinada que acaba en obra de arte, en cada rima desentonada, en cada libro primerizo, en cada sabor, en cada olor, aunque sea nauseabundo, pues puede acabar en un poema agrio o en una flor marchita; la descubrimos en cada mirada, tanto como si está cristalizada por las lágrimas, como si está decorada con esos ojos chinos y esos arrugamientos alrededor de no parar de reír; en cada sonrisa, aunque este desdentada...
La belleza es moldeada constantemente, tanto por nosotros como por la naturaleza, impregna cada instante de nuestra vida y puede ser creada por arquitectos, escultores, diseñadores, escritores, músicos e incluso por nosotros mismos, que tenemos un poquito de cada cosa. La belleza no distingue en sexo, ni en raza, ni en religión. La belleza puede ser algo efímero, como las modas, o algo eterno como las sonrisas. La belleza es todo y es nada, depende de cómo quieras ver la vida.
Tamara Pérez

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